sábado, 21 de febrero de 2009

CHI-CHI! LE-LE! COLO-COLO DE CHILE!

Colo Colo es el equipo más grande y representativo de Chile. El único diría yo. Tanto así, que cuando le preguntaron a Didier Drogba, si conocía algo de Chile, su respuesta no fue ni Pinochet ni Zamorano, fue Colo Colo. U otra vez, cuando llevé a un alemán a comprar droga a una favela santiaguina, vio unos niños jugando con una pelota y lo primero que dijo fue…Colo Colo.
Tras ganar por tres años el campeonato nacional, hay hambre de Libertadores. ¿El grupo? No es fácil. Palmeiras es, al igual que Colo Colo, un grande del continente y LDU de Ecuador es el último campeón, aunque si somos realistas, el fútbol de Ecuador es no que muy fácilmente se podría calificar de “menor”. Y Sport Recife…Sport Recife vendría siendo a mi gusto el más débil de grupo.
De ellos no se conoce demasiado fuera de su director técnico Nelsiño Batista, que entrenó a Colo Colo a fines e los noventa, pasando sin pena ni gloria. También me enteré de que jugaban con línea de 3 en el fondo, algo muy raro en un equipo brasileño.
De todos modos Sport Recife no nos asusta. Hace tiempo que el fútbol brasileño,- y esto algo que le va a doler – está un peldaño abajo del argentino a nivel de clubes.
A favor e Colo Colo estará esta noche su estadio lleno y jugadores de la talla de Macnelly Torres y Lucas Barrios. La lógica lo indica: deberíamos ganar.
No obstante este partido será una buena forma de medir en qué pie estamos para soñar. I no le ganamos a Sport Recife, el débil del grupo, las cosas se pondrían cuesta arriba.
Así empieza entonces otra edición de la Libertadores, el torneo más apasionante del mundo. Y como siempre digo, una cosa es segura: siempre termina en lágrimas. ¿De felicidad o de tristeza? El tiempo lo dirá.


Javier Mardones, periodista chileno.